Entrevista a Pedro J. Martín.
Lia: ¿Qué le ha motivado a la hora de escribir el libro?
Pedro: Esta historia en concreto la escribí porque soy de
Huelva, me gusta mucho Huelva y la historia en general, pero sobre todo la de aquí.
Aquí hay mucha historia que contar y pensé que la del terremoto se
conoce muy poco. Si buscas por internet los datos que hay son los que todo el
mundo conoce pero no había libros ni escritos sobre el terremoto ni sobre las consecuencias tan terribles que
tuvo aquí. Entonces me puse a indagar y a investigar y había
personajes interesantes como Jacobo del Barco y pensé que era una buena
historia.
Lia: ¿Cómo se ha inspirado para crear los personajes?
Pedro: Bueno, al ser mi primera novela, en ese aspecto
estaba un poco verde. Uno es Jacobo del Barco, he estudiado y leído sobre él y
me pareció interesante porque tuvo bastante que ver en la rehabilitación de Huelva, sobre todo en
las parroquias de San Pedro y la Concepción. Para los demás personajes he
tomado rasgos físicos. Cuando hablo de Antonio tengo a mi suegro en la mente.
Utilizo también rasgos míos, haciendo una especie de mezcla.
Lia: ¿Le ha sido difícil encontrar datos de esa época?
Pedro: Me han ayudado mucho en la Casa Colón. Me dieron
periódicos y recortes antiguos que encontraron. También en la biblioteca y mi
sobrina me buscó en la universidad mucha información sobre el terremoto.
Después también he buscado por internet.
Lia: ¿Le resultó difícil publicar?
Pedro: He tenido la suerte de que en el mundo en el que
estamos tres editoriales se han interesado por la novela. Son entidades
pequeñas pero eso ya es un logro. Firmé con una que por discrepancias no llegué
a publicar y luego encontré esta. (Tranvia)
Lia: ¿Tiene pensado escribir otra novela?
Pedro: Tengo otra escrita que espero que salga a final de
este año. Tengo una tercera en la que estoy ahora mismo inmerso.
Miguel: ¿Alguna pincelada de la que tiene escrita?
Pedro: La segunda ya está registrada. No tiene nada que ver
con este (El color gris de la Esperanza). Es una historia actual, una novela
más corta y personal. En este prácticamente solo hay un personaje, como mucho
dos. Es como un mono tema del personaje que encierra un pasado y un presente. Mucho
tiene que ver con momentos de soledad, hablando consigo mismo y recordando las
miserias pasadas.
Miguel: ¿Ya hay título?
Pedro: Sí, ‘Al abrigo de los girasoles’. Es una metáfora del
personaje martirizado. En su infancia tuvo problemas con su padre, un borracho
y huye de allí. Veinte años después vuelve al enterarse de la muerte de su
padre, el que le ha dejado una parcela con vistas al cementerio y se refugia
allí, huyendo de un nuevo trauma.
Lia: ¿Ha cambiado en algo su vida desde que publicó el
libro?
Pedro: Cambiar no, pero hay cosas que me sorprenden.
Experiencias nuevas que son gratas. Hace unos días fui a la presentación de
Pinzón, escritor de aquí de Huelva, y que te vean, te conozcan y quieran
hacerse una foto contigo son cosas que antes no pasaban o conocer a otros
escritores, amigos, que son lo mejor que me estoy llevando.
Lia: ¿Cómo se decidió a escribir?
Pedro: Pues tengo un trabajo que me obliga a pasar mucho
tiempo fuera de casa, trabajo en el montaje. He llegado a pasar ocho o nueve
meses fuera de casa. Cuando pasas tanto tiempo fuera, cuando sales de trabajar,
te vas al bar y tal o haces lo que hacía yo, que era encerrarme en una
habitación y ponerme a leer. Hasta que un día empiezas a pensar en escribir
algo. Me dije: ¿Por qué no? Vamos a intentarlo por lo menos. Y me decidí a
escribir unas páginas y se las enseñé a mi mujer. A ella le gustaron y a partir
de ahí he llegado hasta donde estoy ahora.
Lia: ¿Tiene algún estudio realizado que esté relacionado con
la escritura?
Pedro: No, soy autodidacta. Lo poco que sé es porque he
leído mucha novela histórica y al gran Saramago.
Lia: Cuando eras pequeño, ¿pensabas que algún día
escribirías un libro?
Pedro: No. No es una afición que tenga desde pequeño, me
surgió por mi trabajo. Era una forma de matar las horas muertas y me aficioné a
ello.
Lia: ¿Qué espera conseguir con su libro?
Pedro: Lo único que espero es que la gente lo lea. Lo que
más me gusta es la crítica de la gente, sobre todo cuando me dicen que han
llorado o se han emocionado. Eso es bonito. Que abras y cierres un libro y te
haya emocionado.
Lia: Y si algún día fuese un escritor de renombre, ¿qué es
lo que le gustaría conseguir?
Pedro: Me gustaría dedicarme a esto, a algo que realmente me gusta. Y, aunque
fuese modestamente, vivir de esto para mí sería el logro más grande.
Lia: ¿Te sientes identificado con alguno de tus personajes?
Pedro: Sí. El personaje principal, Juan, tiene bastante de
mí. Hay cosas que no. Pero sus ganas de aprender, no conformarse con lo que la
vida le ha proporcionado y luchar por lo que quiere son pinceladas mías.
Lia: ¿Duró mucho el proceso de creación?
Pedro: Lo que es el estudio unos tres o cuatro meses. Estuve
informándome y estudiando y conforme fui escribiendo no he dejado de
informarme. Como amante de la novela histórica lo que no quiero es que alguien
lea la novela y piense que hay algo que no fuese así en la época.
Lia: ¿Cuáles son tus escritores referentes?
Pedro: José Saramago. Cuando leo a Saramago se detiene el
mundo. También Santiago Posteguillo e Idelfonso Falcones. En general escritores
de novela histórica. Pero, sobre todo, Saramago.
Lia: ¿Le resulta fácil compaginar la escritura con su
trabajo actual y su vida?
Pedro: Me he llevado muchas noches en vela. Por suerte tengo
una mujer y dos niños comprensivos que me han ayudado. Pero cuesta. Cuando
estás fuera es más fácil pero cuando estás en casa es más complicado.
Lia: ¿Escogió la imagen de la portada?
Pedro: No, pero es preciosa. Yo di una idea de lo que quería
al diseñador de la editorial y me gustó mucho la que hizo y coincide mucho con
la novela.
Lia: ¿Qué consejo le daría a alguien que quiere ser escritor?
Pedro: Aún estoy empezando para dar consejo pero bueno.
Sobre todo que no lo deje, por mucho que le digan. Esto es constancia, sacrificio,
mucho tesón y muchas horas. Que si le cierran una puerta siga buscando. Hoy en
día, gracias a Dios, hay muchas herramientas, como Amazon. Hay muchos sitios para
publicar un libro, así que, si es lo que le gusta, adelante.
Hasta aquí la entrevista. Después Pedro nos firmó su libro y tomamos algunas fotos en el Parque Moret (Huelva). No me queda más que recomendar su estupenda novela y dar las gracias a Pedro por su tiempo y expresarle nuestra admiración. Esperamos impaciente 'al abrigo de los girasoles'.
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