Escondo mi alma entre las sombras, temerosa de ser vista. Y ciego mi mirar, la oscuridad oculta aquello que no quiero ver; o quién sabe...quizá no me atrevo.
Bajo la luz brotan mis inseguridades, agacho los hombros y me hago pequeña. Quiero pasar desapercibida ante este mundo que me aplasta; quiero correr a mi escondite, aquel en que nadie puede rasgarme, donde las palabras no hieren y reina el silencio. Allí entre las sombras puedo ser yo. Y lloro por no encontrar una mirada cierta, una palabra nunca pronunciada, lloro porque mi espacio no existe.
Aun en este lugar, ajena a todo lo dañino, sigo encontrando dolor; uno que otros crearon y que siguen creando día tras día. Es el sufrimiento que se alojó en mí; sin embargo, tras los surcos generados por el derrame de mis ojos elimino poco a poco el veneno. Limpio mi ser, y la sombra me acuna esperando que llegue de nuevo el maldito amanecer.
Bajo la luz brotan mis inseguridades, agacho los hombros y me hago pequeña. Quiero pasar desapercibida ante este mundo que me aplasta; quiero correr a mi escondite, aquel en que nadie puede rasgarme, donde las palabras no hieren y reina el silencio. Allí entre las sombras puedo ser yo. Y lloro por no encontrar una mirada cierta, una palabra nunca pronunciada, lloro porque mi espacio no existe.
Aun en este lugar, ajena a todo lo dañino, sigo encontrando dolor; uno que otros crearon y que siguen creando día tras día. Es el sufrimiento que se alojó en mí; sin embargo, tras los surcos generados por el derrame de mis ojos elimino poco a poco el veneno. Limpio mi ser, y la sombra me acuna esperando que llegue de nuevo el maldito amanecer.
Mi Pluma LMC
¡Brillante!
ResponderEliminarMuchas gracias, Fernando. Me alegra que te guste :)
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